RECETA TARTA ARCO IRIS DECORADA CON CHOCOLATE BLANCO
Lo prometido es deuda, y como os dije en el post anterior sobre la fiesta temática Arco Iris, os voy a contar cómo hice la tarta Arco Iris.
Antes de empezar con la receta, os cuento un poco porque usé esta receta y no otra.
Estuve buscando mucho en internet recetas para hacer esta tarta. Una opción era hacerla tipo "layer cake", pero como aún no he hecho ninguna layer cake, me pareció que liarme a hacer un layer cake de 5 pisos y además de colores era más que arriesgado.
Otra opción era hacer una tarta de queso, ya que la había visto hecha en fotos y parecía que quedaba genial. El problema era que como en la fiesta también había cupcakes con cheese buttercream, me parecía que era demasiado queso, y tampoco me parece una tarta muy adecuada para los niños.
Así que me encontré con recetas en páginas americanas, que usaban preparados para conseguir una masa blanca (que no tengo facilmente al alcance ni me apetece usar), y algunas recetas que no me convencían ya que el bizcocho quedaba poco compacto y al cortarlo se perdía mucho el efecto (si, si, soy un poco perfeccionista ;-) jeje)
De repente me acordé del bizcocho de Zebra de Lorraine Pascale. Pensé que podía adaptarlo a una tarta Arco Iris (si, vale, un poco atrevido), y como me encanta Lorraine Pascale y tenía ganas de hacer alguna receta suya...me lancé.
RECETA DE BIZCOCHO ARCO IRIS
(es una adaptación del Bizcocho de Zebra de Lorraine Pascale)(en teoría es para un molde de 23cm, pero yo usé uno de 27cm y me salió bien)
Ingredientes
250ml de aceite de girasol
250g azúcar glas
100ml de leche semidesnatada
4 huevos medianos (a temperatura ambiente)
unas gotas de extracto de vainilla
325g de harina con levadura
1 cucharadita de levadura en polvo
ralladura de naranja o limón (opcional)
Preparación
Precalentar el horno a 180º (si es con función ventilador a 160º)
Preparamos 5 recipientes (o 6, según la cantidad de colores que queráis hacer) y vertemos la mezcla en los recipientes. Aquí viene la parte importante: tenéis que verter más mezcla para el color que irá en la parte más exterior del bizcocho, un poco menos para el siguiente, un poco menos para el siguiente...y seguir así, ya que sino os pasará como a mi, que el primer color casi no cubría el fondo, como se ve en esta foto: (y hay demasiado del último color, como se ve en la foto con todos los colores)
Y al final queda algo así... listo para meter en el horno.
Después de unos 35 minutos en el horno...
Y no os imagináis que ganas de cortarlo para ver los colores del interior!!
La verdad es que quedo muy compacto, con los colores muy bien definidos.
Gran fallo de novata, no saqué ninguna foto de un corte.
Además es un bizcocho muy sabroso, suave, nada empalagoso ni dulce, perfecto para decorar.
La decoración esta hecha con chocolate blanco coloreado (atención: hay que usar colorantes especiales para chocolate, los de Candy-Melts de Wilton os sirven).
La cobertura también es de chocolate blanco. He hecho ya algunas tartas con cobertura de chocolate blanco y voy probando varias recetas, ya que me gustaría conseguir un acabado liso y brillante, que no se rompa... y con el chocolate blanco parece que esto es complicado, así que se aceptan sugerencias.
Para esta tarta usé esta cobertura:
250gr de chocolate blanco
200gr de nata para montar
3 hojas de 2 g de gelatina
Preparación
Poner la gelatina a hidratar con agua fría.
Poner en una cacerola al fuego la nata y el chocolate. Remover constantemente para que el chocolate se funda. Cuando se haya formado una crema líquida y homogénea, retirar del fuego y dejar enfriar un poco.
Exprimir la gelatina y añadirla a la crema, removiendo. Cuando se haya disuelto bien pasar por un colador fino para asegurarnos que no quedan grumos.
Dejar enfriar a temperatura ambiente y la cobertura ya está lista.
Poner la tarta encima de una rejilla (yo uso la del microondas) con una bandeja, plato o papel de horno debajo. Así podemos recoger la cobertura que cae.
Verter con cuidado sobre el bizcocho. Esta cobertura es absorbida por el bizcocho, por lo que es recomendable cubrirlo primero con una capa de vuestra crema preferida, nata... Otra opción es aplicar dos capas de cobertura. para ello debes aplicar una capa fina primero, poner el bizcocho 2 horas en la nevera, y repetir la operación.
La cobertura cuando se enfría se pone más sólida, así que tendrás que ponerla en el microondas para poder verterla de nuevo.
Mi experiencia con esta cobertura es que tiene un aspecto brillante y un sabor delicioso, ya que al llevar bastante nata no es tan empalagosa como el chocolate blanco. El inconveniente de esta receta es que hay que encontrarle el punto en que esta ideal para verterla sobre el bizcocho, que no esté muy líquida ni muy sólida. Supongo que es cuestión de práctica.
La primera capa me quedo perfecta, lisa y brillante, pero transparente, y como no lo puse a la nevera antes de dar la segunda capa...fue un desastre...así que os aconsejo que no tengáis prisa y lo hagáis.
(si queréis ver la receta original la tenéis AQUÍ)
Espero que os animéis a probarlo!
Besos!
Partty
Preparación
Precalentar el horno a 180º (si es con función ventilador a 160º)
Engrasar el molde con aceite de girasol, colocar un papel de horno en el fondo del molde, y de nuevo engrasar. también podéis usar mantequilla para hacerlo.
Se usa aceite de girasol para la receta ya que el aceite de oliva tiene demasiado sabor.
Se usa aceite de girasol para la receta ya que el aceite de oliva tiene demasiado sabor.
Poner el aceite, el azúcar, los huevos y el extracto de vainilla en bol y batir bien. Es aconsejable batir a mano ya que para este bizcocho no nos interesa introducir burbujas.
Tamizar la levadura con la harina y agregar al bol. mezclar hasta que se integre bien. Si queremos podemos añadir la ralladura de una naranja o un limón.
La masa tiene un color amarillento (lleva 4 huevos), así que es un poco complicado sacar los colores.
Este es el único defecto que tiene este bizcocho.
Cuando tengamos los colores preparados, los verteremos en el molde. Puede hacerse con una cuchara, pero yo preferí hacerlo con manga pastelera. Es más fácil y las formas quedan más perfectas.
Solo hay que colocar la manga en el centro del molde e ir presionando, y veréis como va desplazando el color que hayáis colocado debajo. Hay que tener paciencia y presionar poco a poco, ya que la masa no es muy líquida y se desplaza poco a poco.
Después de unos 35 minutos en el horno...
Y no os imagináis que ganas de cortarlo para ver los colores del interior!!
La verdad es que quedo muy compacto, con los colores muy bien definidos.
Gran fallo de novata, no saqué ninguna foto de un corte.
La decoración esta hecha con chocolate blanco coloreado (atención: hay que usar colorantes especiales para chocolate, los de Candy-Melts de Wilton os sirven).
La cobertura también es de chocolate blanco. He hecho ya algunas tartas con cobertura de chocolate blanco y voy probando varias recetas, ya que me gustaría conseguir un acabado liso y brillante, que no se rompa... y con el chocolate blanco parece que esto es complicado, así que se aceptan sugerencias.
Para esta tarta usé esta cobertura:
COBERTURA DE CHOCOLATE BLANCO
Ingredientes250gr de chocolate blanco
200gr de nata para montar
3 hojas de 2 g de gelatina
Preparación
Poner la gelatina a hidratar con agua fría.
Poner en una cacerola al fuego la nata y el chocolate. Remover constantemente para que el chocolate se funda. Cuando se haya formado una crema líquida y homogénea, retirar del fuego y dejar enfriar un poco.
Exprimir la gelatina y añadirla a la crema, removiendo. Cuando se haya disuelto bien pasar por un colador fino para asegurarnos que no quedan grumos.
Dejar enfriar a temperatura ambiente y la cobertura ya está lista.
Poner la tarta encima de una rejilla (yo uso la del microondas) con una bandeja, plato o papel de horno debajo. Así podemos recoger la cobertura que cae.
Verter con cuidado sobre el bizcocho. Esta cobertura es absorbida por el bizcocho, por lo que es recomendable cubrirlo primero con una capa de vuestra crema preferida, nata... Otra opción es aplicar dos capas de cobertura. para ello debes aplicar una capa fina primero, poner el bizcocho 2 horas en la nevera, y repetir la operación.
La cobertura cuando se enfría se pone más sólida, así que tendrás que ponerla en el microondas para poder verterla de nuevo.
Mi experiencia con esta cobertura es que tiene un aspecto brillante y un sabor delicioso, ya que al llevar bastante nata no es tan empalagosa como el chocolate blanco. El inconveniente de esta receta es que hay que encontrarle el punto en que esta ideal para verterla sobre el bizcocho, que no esté muy líquida ni muy sólida. Supongo que es cuestión de práctica.
La primera capa me quedo perfecta, lisa y brillante, pero transparente, y como no lo puse a la nevera antes de dar la segunda capa...fue un desastre...así que os aconsejo que no tengáis prisa y lo hagáis.
(si queréis ver la receta original la tenéis AQUÍ)
Espero que os animéis a probarlo!
Besos!
Partty
Has probado con el ganache de chocolate blanco? Es otra buena opcion para la cobertura, lo bueno que tiene es que no se ve transparente, puedes verterlo si lo calienteas en micro, o ponerlo con espatula y te queda un acabado perfecto
ResponderEliminarNo lo he probado ya que no sabía que si se calienta se puede verter. Siempre lo he visto como cobertura con espátula. Buscaré la receta y lo pruebo, a ver que tal.
ResponderEliminarMuchas gracias por la sugerencia!!